Hoy en mi camino a casa, he visto un accidente entre dos coches, que por suerte no ha ido a mayores.
Los conductores de los respectivos vehículos han bajado y, por lo que he visto, parecía que simplemente se estaban dirigiendo cada uno a buscar los papeles del seguro para cursar el parte.
Mi reflexión viene de años atrás, y simplemente aprovecho que empezáis a leer mi blog bastante gente, para ver si tenéis algún conocido, amig@ de un@ amig@ o vosotros mismos, trabajáis en los crash tests (cosa de unos pocos entiendo yo).
Básicamente se trata de poner de manifiesto que en las colisiones en un gran porcentaje siempre se frena. Y claro, al frenar, la dinámica del coche varía, ya que en el caso de una colisión entre dos coches por detrás, el coche que está delante, al frenar, hace que la propia inercia de la velocidad haga que la suspensión delantera trabaje más y se hunda, mientras la trasera se aligera y por tanto asciende. Pasa lo mismo con el coche de atrás, y claro, en el momento de la colisión, no colisiona parachoques con parachoques, sino parte baja de un parachoques con radiador y frontal del otro … con unas dinámicas de torsión muy distintas que los propios parachoques (pienso en un sistema de Volvo de hace unos años). Con esto me vengo a referir que esos crash test que se ven en la televisión, no he visto ni una sola vez que el coche frene antes de la colisión. ¿Por qué no hacen que los vehículos circulen más rápido en las pruebas, frenen y luego tomen las mediciones del crash en base a este comportamiento que me aventuro a decir que ocurre en el 80% de los accidentes (lo de 80 lo digo por lo de Pareto :-))?
Quizás más de un accidente mortal podría ser minimizado teniendo en cuenta este factor.
¿Y esto que tiene que ver con el cine? Pues nada 🙂 … bueno casi … me acuerdo de la película de abogados titulada Acción Judicial con Gene Hackman y Maria Elizabeth Mastrantonio … sobre un tema relacionado con accidentes, mala fabricación de un modelo de coche (el efecto carga de profundidad) y la confrontación de padre e hija como abogados en el juicio.
Otra película relacionada con este tema de los accidentes es Destino Final 2, donde hay una de las mejores secuencias de efectos especiales (SFX) de la historia del cine en mi humilde opinión: un choque en cadena múltiple en una carretera secundaria según la premonición de uno de los actores. Vale la pena verla, sólo por esta secuencia.